Hablando del Sr. Voz

No entiendo porque no me gusta quedarme sola en lugares desconocidos, ni si quiera unos instantes.
Sentada de espaldas a la playa, observando los mástiles desde este sitio donde me han dejado esperando no se que, de todo lo sucedido hoy me he descubierto compleja ante la evidencia se acabo el amor.
No soporto los comentarios poco acertados, no tolero los engaños ni las encruzujadas, pero como por inercia siempre me hayo en un mundo de mentiras.
¿Porque tantos misterios? ¿a que es debido tanto secretismo?
Todo se desploma como un bloque en detonación.
No es que no quiera a la voz. Quizás le regale más amor y compresión, que tuvo jamás.
Sólo palos, golpes bajos, desconfianza, terceros que han resultado ser los únicos amigos de lo ajeno que han traicionado al señor voz. Y yo sigo a su lado, esperando no se que, de el sólo puedo esperar endados, conflictos e infidelidad.
Mientras todas estas artimañas destruián mi vida
¿tu, donde estabas?
Me he despertado en un frío amanecer de cama desecha de excesos, de descubrir que matamos el amor, que sus asesinos, sólo querían robar a voz una vida de trabajo, pero que no sólo se han llevado dinero, también se encargaron de debastar el amor.
Y sintiendolo tanto que me interior se ahoga en lágrimas, quizás es el momento de decir adiós o de sentarse a esperar, que esto por si sólo llegue al fin.
Sigo esperando, no se como me las arregló para perder mi tiempo esperando a hombres que no regresaron, o que llegaron tarde. ¿para que y con que buen argumento sirven estas largas esperas?
Enviado desde mi BlackBerry® de Vodafone ( En algun lugar de la costa azul)